La tercera es la vencida

Por Jaime Iván Cortes Sandoval

Una de dos. O Argentina sólo juega a esperar las individualidades, o bien, no se ha querido despeinar. Sin intensidad, ni ritmo, pero con un Messi en segunda velocidad, los argentinos lograron derrotar cuatro goles por cero a la selección anfitriona. Por tercera vez consecutiva, la Albiceleste se instala en la final.

No había llegado el futbol cuando el marcador ya había mutado. Un tiro de esquina reencausado por Lionel Messi, terminó por minar las redes defendidas por el cancerbero Guzan. Al minuto 3, un saque corto desde el vértice de la alfombra verde, terminó en los pies del 10 del Barcelona, quien regresó la número cinco a Lavezzi, quien con un remate de cabeza por encima del portero estadounidense anotó el primero de la noche.

Apenas rebasando la media hora del encuentro, una falta táctica convertida sobre Messi terminó por hinchar el marcador de los sudamericanos. El rosarino ejecutó su tiro libre de manera excelsa. Mandó a guardar el balón a la escuadra de Guzan con una precisión casi quirúrgica y una fuerza digna de medir. El partido era del sur.

Iniciando la segunda mitad del compromiso, Gonzálo Higuaín anotó su gol. Tras un centro desde la banda izquierda, el 9 nacido en Francia trato de rematar de primera intención, pero la intención sólo terminó en un rebote. La segunda oportunidad no fue desaprovechada por el goleador del Calcio italiano.

 

A los 69 minutos tuvo que venir un accidente para que algo pasara en la cancha. Lavezzi perdió la percepción del campo y en la búsqueda de un servicio terminó por impactarse contra los anuncios publicitarios. El autor del primer gol quedó tendido por varios minutos fuera del terreno de juego hasta que fue trasladado al vestuario del NRG Stadium. Todo parece indicar que se perderá la final de la justa veraniega.

Gonzálo Higuaín encontró su doblete al crepúsculo del encuentro. Un error garrafal en la salida estadounidense fue tomado por Lionel, quien condujo unos metros para después servir al Pipita quien sólo empujó el balón. Un gol y dos asistencias para el jugador del Barcelona.