Por Víctor Méndez
“Quería
hacer algo que no dijera solamente ‘te amo’, ‘te extraño’. Quería que
sirviera para algo porque si no, no tiene sentido. Mi idea era alcanzar
tantos corazones como pudiera”. Ésa es la ideología con la que Sophy
Mell comienza su carrera que ya ha concebido un primer tema: “Ni Diabla
Ni Santa”. Pero dar este primer paso no fue sencillo, debido a la idea
de la cantante de alejarse de lo ya hecho, aunque chocara con la opinión
de productores que la querían llevar por otros caminos.
Estudiada
en música, escogió la voz como su instrumento cuando se dio cuenta de
la facilidad para “transmitir mensajes a través de canciones”, que de
otra forma no tendrían la misma fuerza. Y en el proceso de la
composición decidió además que su música “no se pareciera a algo que ya
existe en el mercado”, Mell tenía una canción en la cabeza que buscaba
cómo salir, pero no encontraba cómo: “necesitaba un productor que me
leyera la mente”.
La cantante ecuatoriana quería acercarse al
pop: un pop que tuviera una esencia distinta, que estuviera impregnado
de “un toque urbano”. Y una vez decidido el género, emprendió un viaje a
Barcelona para componer y grabar un álbum, con un productor que de
nueva cuenta, decidió alejarla de su objetivo original. ¿El resultado?
“Tuve que empezar de cero”, recuerda Mell, “si tú no sientes nada al
cantar tus canciones, no lo puedes transmitir al público”.
“Ni
Diabla Ni Santa” fue un vertedero de emociones para Sophy Mell. “Un
reflejo de vivencias, de frustraciones” que desembocaron durante su
estancia en Nueva York, donde compuso este tema. “El resultado de toda
una búsqueda y de lo que quería lograr”, y destacó, “darle poder a las
mujeres, respetar su esencia independientemente de cómo sea; hacer que
se diviertan y rompan tabúes; es un acto de protesta”.
La
elección de la compositora por este estilo musical se debió a su
fascinación por el mismo, a que “mueve, contagia e impregna la energía
hacia otras personas” con más facilidad que otros. “También quería
mostrarme tal cual soy, y me servía para plasmar mis antecedentes en el
jazz y en el blues en el arreglo musical. Hay que hacer lo que uno
siente”, mencionó.
Si bien tiene la idea del empoderamiento
femenino, Mell comentó que lejos estaba de “ser violencia de género”, a
lo que agregó que “la diferencia de las mujeres ante los hombres nos
hace únicas, debemos aceptar ese lugar, pero con dignidad y respeto”.
Aunque
aún no tiene fechas confirmadas en México, la cantante aseguró que está
entusiasmada por concretar una gira en el país. También, para respaldar
la emoción que le daba venir a estos lares, habló sobre cómo Thalía
había influido en ella, desde que veía sus telenovelas hasta escuchar sus canciones, y confesó que si pudiera colaborar con alguien, sería con ella.
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