Menu

Menú

domingo, 12 de junio de 2016

Beso croata





Por: Yael Rueda

La máxima expresión de amor en el mundo siempre puede resumirse en un beso, no importando si es de un padre a un hijo, a la persona que amas o por qué no a un futbolista en pleno certamen continental.

Corría la recta final del primer tiempo en el partido entre Croacia y Turquía cuando el centrocampista del Real Madrid, Luka Modric, puso cifras definitivas a un partido trabado donde poco se había generado para romper la igualada; Modric prendió de volea un esférico que se incrustó en la meta turca haciendo estallar el grito de gol.

Eufórico, Luka corrió al banderín de corner acompañado por algunos futbolistas de su equipo, entonces un espontáneo saltó al campo enfundado en la clásica remera a cuadros de la selección balcánica así como el cabello pintado en rojo y blanco, corrió a donde yacían sus héroes festejando el gol, se enfundó en un abrazo con ellos y besó la mejilla de Luka Modric, el único futbolista que en un instante de  genialidad pudo otorgar tres puntos a los suyos y de paso hacer explotar el amor por Croacia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario