Por: Jaime Cortés Sandoval
Clima inesperado. En medio de la lluvia y el frío, los tuzos de Pachuca se llevan la ventaja mínima en su campo con un gol de Franco Jara
al minuto 60. Los de la Bella Airosa fueron una muralla ante unos
rayados que nunca encontraron las reglas del juego. El compromiso está
vivo, el campeón se definirá en la casa de los regiomontanos.
Un inicio trepidante. Apenas al minuto 6 Lozano tuvo la oportunidad de agitar las redes de los visitantes, sin embargo, la redonda fue atajada por Jonathan Orozco. Cuatro minutos después, Pizarro dejó ir la posibilidad de definir frente al marco, cuando no aprovechó una gran jugada individual de Jara.
La falta de contundencia se contagió como el nerviosismo en las gradas. Cardona
apareció sólo para rematar un balón de tiro de esquina, pero no conectó
de buena forma la redonda y dejó pasar una de las mejores oportunidades
que los visitantes tuvieron durante los 90 minutos.
Si bien, la contundencia no apareció, el asertividad de Orozco
nunca se vio mermada. El cancerbero rayado se encargó de mantener su
meta en blanco durante toda la primera mitad. Un par de intervenciones
le valieron ser la figura del partido.
La segunda mitad se vio manchada por una mala decisión arbitral. Al minuto 54 un tiro de Urretaviscaya fue tapado por la mano de Efraín Juárez. Sin embargo, apenas seis minutos después Franco Jara reventó las gargantas de todos los aficionados en el Huracán. Un testarazo que fue al ángulo superior izquierdo convirtió a Orozco en un espectador de primera fila. Ninguna opción de reacción para el destacado guardameta.
El tiempo transcurrió y el marcador se congeló. La ofensiva regia no
funcionó. La posesión blanquiazul no surtió efecto directo en el
marcador. Los rayados pagan una renta barata para el transcurrir del
encuentro. La final sigue viva y se definirá en casa de los dirigidos
por Mohamed.
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