"Lo prometimos el año pasado y hoy estamos aquí" fue la carta más fuerte que Roberto Musso traía la noche de anoche en el venue favorito de los hipsters, El Plaza Condesa.
Luego de haberse presentado a mediados de Mayo del año pasado con un Plaza Condesa más íntimo con menos de la mitad del lleno, en pleno 2016, El Cuarteto de Nos regresó con a nada, NADA de llenar el venue.
Las 21:00 horas llegaron, y un poco indecisos por la tentadora oferta de "lleve su playera, taza, llaveroooo" (si, con ese tono), que realmente estaban baratas, los fans de los reyes uruguayos de la lírica entraron al foro esperando ansiosos por saber cual era la sorpresa que iba a hacer este show diferente al de el año pasado, si de hecho las dos presentaciones fueron promocionando el último disco Habla tu espejo #FanFact.
En menos de diez minutos salió el cuarteto, (que en realidad es quinteto) al escenario y sin decir "agua va" sonaron los primeros acordes de "Buen día, Benito" acompañada de Musso y un pasamontañas en el rostro, lo que confundía un poco entre sí estaba mal el audio o era lo que traía en la cara que impedía que se le entendiera una sola palabra.
Poco más de 20 canciones hicieron de este show algo completamente diferente, no solamente en setlist, se sentía hasta en la vibra, mis chavitos que el año pasado no le quisieron dar oportunidad a la banda, esta vez le dieron un poco a la estudiada de canciones y no hubo una sola que los seguidores no cantaran.
Después de dejarnos en claro "Lo malo de ser bueno" y que "Nada es gratis en la vida", Musso tomó un breve descanso dejándonos con las caderas jadeantes de Santiago Tavella moviéndose al ritmo que cantaba "Enamorado tuyo".
"Bipolar", "Habla tu espejo", "Así soy yo" y "Cuando sea grande" siguieron en la fila del pacto con el diablo que debe tener el vocalista para poder cantar de esa manera.
Lo que realmente impresiona es el estilo único que tiene El Cuarteto de Nos para dar cátedra de una manera tan natural, con más de 20 años de carrera y con canciones emblemáticas como "Roberto", "Miguel gritar", "El hijo de Hernández" e "Invierno del 92".
Como fan de esta banda, te ves en la penosa necesidad de que aunque te sepas todas las canciones debes pensar en cual quieres descansar y no cantar, no porque no las conozcas, sino porque es humanamente imposible no cansarte en por lo menos la mitad del concierto.
Canciones más tranquilas y suaves como "No llora" y "Pobre papá", acompañaron el show y le dieron ese feeling que se necesitaba entre tanto grito y fan en hombros.
El necesario encore llegó, pero los dos minutos que la banda se metió no estuvieron vacíos del todo, los fans de la banda sin organización alguna empezaron a cantar a capella "Me encanta mi aspecto, de hombre tan perfecto, sho soy lo más grande que hay..", por lo que Roberto Musso, Santiago Marrero, Gustavo Antuña, Alvin Pintos y Santiago Tavella no tuvieron otra opción que regresar a tocar "Me amo" cerrando la noche con el estandarte más grande que El Cuarteto de Nos ha tenido durante todos estos años, "Yendo a la casa de Damián".
Una noche que nos dejó con ganas de más pero en paz, anunciaron que están próximos a grabar nuevo material y sobre todo que regresan a nuestro país que tanto los quiere. Así que, querido Musso: si un día te despiertas y piensas "Ya no se que hacer conmigo", no hay de otra, vente para México que vamos a querer de tu rock mucho tiempo más.
PH: Oscar Villanueva
Texto por: Laura Rentería
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