Por Pablo Maldonado
Ph Agencia SUN
Joven, idiota, patético y enamorado, parece
ser la combinación para una película que no te hará parar de reír por
más de una hora y media.
Javier, un joven diseñador con un futuro
brillante se encuentra en su camino con Sofía, una chica muy bella que
trabajaba con el en un despacho de diseño y con la cual tuvo una
relación bastante larga, la cual como todo lo que empieza tiene que
acabar y de ahí en adelante comienza el infierno que todos hemos pasado
por desamor.
A partir de éste punto cabe mencionar que
no hay nada mas autodestructivo para un hombre que perder a la mujer que
ama y esto fue lo que le pasó a nuestro joven protagonista, que de
estar en la cumbre de su vida profesional su ruptura amorosa lo lleva al
punto de la crisis, principios de alcoholismo, perder su empleo y
terminar solo y sin nadie, solo con su única compañía y mejor amiga
Andrea, quien está siempre para el aún que sus problemas sean igual o
peores y con la que al final encontrara el refugio que tanto buscó.
Malas decisiones, inexperiencia y depresión
llevarán a Javier a múltiples situaciones hilarantes, absurdas y
divertidas, que harán reír a cualquiera que haya vivido en carne propia
lo tortuoso que es perder y extrañar un gran amor.
Una película escrita por Nicolás López,
dirigida por Luis Eduardo Reyes, un remake de la película chilena
estrenada en 2010 pero con un tinte mexicano que hará reír a todos en la
sala.
En fin, una comedia romántica del nuevo
cine mexicano como ya ha habido varias, llena de jóvenes talentos
mexicanos, que solo me hace pensar que se pueden hacer muchas otras
cosas mejores para el cine es éste país, que por talentos no paramos.
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